Manchas marrones en las hojas de albahaca: por qué aparecen y cómo tratarlas

 Manchas marrones en las hojas de albahaca: por qué aparecen y cómo tratarlas

Timothy Walker

Si alguna vez has cultivado albahaca en tu jardín, te habrás dado cuenta de que no siempre es una hierba verde perfecta. Si observas manchas marrones de aspecto muerto en tus hojas de albahaca, es una señal de advertencia de que algo tiene que cambiar en tu régimen de cuidados.

Las manchas marrones en las hojas de albahaca suelen aparecer como consecuencia de cambios bruscos de temperatura, daños por heladas, quemaduras solares, carencias de nutrientes, daños causados por plagas o infecciones fúngicas.

Llegar a la raíz del problema requiere un poco de observación, pero ten por seguro que podrás revitalizar tu albahaca en poco tiempo.

A continuación te explicamos por qué la albahaca tiene manchas marrones, cómo tratarlas y cómo evitar que aparezcan.

¿Se pueden comer las hojas de albahaca morena?

En los jardines de todo el mundo crece la albahaca, una delicia de hierbas aromáticas que se presenta en una amplia gama de colores y variedades, y que es omnipresente en la cocina italiana, mediterránea, del sudeste asiático y de la India.

Ya sea espolvoreada sobre una pizza Margherita o mezclada en un pesto, las manchas marrones de la albahaca no suelen ser un gran problema en cuanto a sabor.

Siempre que las hojas no estén enfermas ni hayan sido rociadas con pesticidas, la albahaca con manchas marrones se puede comer sin problemas.

Sin embargo, las hojas de albahaca marrones no son estéticamente agradables y pueden indicar un problema más profundo en su jardín de hierbas.

Por qué la albahaca tiene manchas marrones en las hojas

Las manchas marrones o negras en las hojas de albahaca suelen ser un signo de un patógeno, daños por frío, daños por plagas o un problema de nutrición de la planta. También puede provocar que la albahaca se vuelva marrón si la manipula en exceso en el momento de la cosecha.

El exceso de humedad de las manos o del recipiente de almacenamiento puede provocar que la albahaca se dore y se marchite prematuramente, lo que reduce su tiempo de conservación en el frigorífico.

Averiguar la causa de los daños de tu planta requiere un poco de investigación. Puedes empezar buscando signos de enfermedad y utilizar un proceso de eliminación para averiguar si se trata de un patógeno, una plaga o un problema ambiental.

Enfermedades que causan el pardeamiento de la albahaca

La albahaca prospera mejor en zonas cálidas y secas con abundante circulación. Un exceso de humedad o la humedad que permanece en las hojas pueden provocar diversas enfermedades causadas por hongos o bacterias patógenos.

1: Mancha bacteriana de la hoja

Si las hojas parecen tener zonas marrones y negras empapadas de agua en las hojas y los tallos, probablemente tenga una infección de mancha foliar bacteriana.

Las manchas de las hojas tendrán un aspecto irregular o anguloso y estarán separadas por pequeñas venas. La bacteria Pseudomonas cichorii suele llegar de trasplantes o semillas contaminados. Le favorecen las condiciones húmedas y las salpicaduras de agua del riego por aspersión.

Las plantas de albahaca con signos de mancha foliar bacteriana deben retirarse y eliminarse. Una pulverización de solución de neem diluida puede ayudar a prevenir la infección de otras plantas,

pero es mucho más fácil utilizar métodos preventivos para futuras plantas de albahaca que intentar salvar las plantas que tienes.

Ver también: ¿Por qué las hojas de mis pimientos se vuelven amarillas? y cómo solucionarlo

Se ha demostrado que las prácticas básicas de higiene en el huerto mantienen a raya la mancha bacteriana de la hoja. Utilice el riego por goteo o mangueras de remojo para que el agua no salpique las hojas de albahaca.

Mantenga un espaciado y una circulación de aire adecuados. Los residuos del cultivo de albahaca no deben dejarse nunca en el jardín o el invernadero para que pasen el invierno.

2: Marchitez por Fusarium

Si su albahaca parece atrofiada, con manchas o estrías marrones en el tallo, hojas marchitas y amarillentas, o caída de las hojas, puede que se trate de una enfermedad fúngica llamada Fusarium.

Se trata de la enfermedad más común de la albahaca y las variedades de albahaca dulce como la 'Genovese' suelen ser las más susceptibles.

El hongo puede propagarse a partir de plantas cercanas, el suelo o las semillas de plantas de albahaca infectadas.

Le favorecen las condiciones húmedas y cálidas y las cantidades elevadas de nitratos de amonio procedentes de fertilizantes sintéticos. Por eso es mejor utilizar abonos orgánicos de liberación lenta y cultivar la albahaca en un suelo bien drenado.

Desgraciadamente, no existe cura conocida para la marchitez por Fusarium. Las plantas infectadas deben retirarse lo antes posible y tirarse a la basura, ya que las esporas transportadas por el aire pueden ser sopladas o salpicar a las plantas cercanas.

El patógeno Fusarium también puede sobrevivir en el suelo, por lo que debe evitar plantar albahaca en esa zona durante al menos 2 años.

Otro gran método preventivo consiste en comprar semillas de albahaca libres de enfermedades y variedades resistentes al Fusarium. Mantenga una buena circulación de aire alrededor de las plantaciones de albahaca.

3: Mildiú velloso

Pernospora belbahrii, otro patógeno que favorece el calor y la humedad elevada, causa el mildiú velloso en la albahaca, especialmente común en la región noreste de EE.UU.

El síntoma clave es el amarilleamiento y pardeamiento que comienza en la vena central y se extiende hacia fuera hasta cubrir la hoja.

A medida que se propaga, se puede observar una fina textura difusa de color púrpura o gris en el envés de las hojas, que es el órgano reproductor de este patógeno llamado esporangio.

Las esporas pueden propagarse muy rápidamente a través del viento, por lo que es importante retirar las hojas o plantas enfermas lo antes posible.

Si la humedad relativa se mantiene alta y la enfermedad avanza, estas lesiones y manchas empezarán a volverse marrones.

El principal método de tratamiento es un fungicida orgánico como el aceite de neem o un spray de peróxido de hidrógeno (¾ de taza de peróxido al 3% por galón de agua aplicado durante 3-5 mañanas consecutivas) y la aplicación de bicarbonato de sodio (2 cucharadas de bicarbonato de sodio por galón de agua rociado directamente sobre la planta durante 1-3 días).

Métodos preventivos como aumentar el espacio entre plantas, utilizar riego por goteo o mangueras de remojo, mantener la higienización del huerto (eliminar los residuos de cultivos),

y plantar variedades de semillas resistentes son las formas más eficaces de evitar la infección por mildiú velloso de su albahaca.

4: Botrytis (moho gris)

Por desgracia, el moho gris es otro patógeno común que ataca a la albahaca en climas húmedos.

Puede identificarla por el característico crecimiento fúngico denso y difuso de color gris a marrón en las hojas y tallos de la albahaca.

Las hojas enfermas mueren y se caen con rapidez, y si se producen varias lesiones en el tallo, puede morir toda la planta.

Si observa que se está desarrollando Botrytis en su albahaca, debe retirar inmediatamente las hojas o plantas infectadas y utilizar las mismas prácticas preventivas descritas anteriormente.

Las aplicaciones de neem o bicarbonato de sodio pueden ayudar a deshacerse de una infección leve de moho gris, pero desgraciadamente no hay muchos fungicidas que sean eficaces para tratar este problema.

Plagas comunes de la albahaca

A pesar de su fuerte aroma, la albahaca puede atraer molestas plagas. Los daños causados por las plagas pueden empezar como simples agujeros, pero las zonas de tejido vegetal dañado acaban muriendo y provocando pardeamiento.

Afortunadamente, identificar las plagas de la albahaca suele ser sencillo y existen muchas opciones de control ecológico.

Pulgones

Los pulgones son pequeños insectos chupadores de savia que quizá también hayas encontrado en coles, repollos, tomates y otras plantas de jardín.

Sus cuerpos son blancos, blandos y de forma ovalada. El signo revelador de los pulgones es una savia negra y pegajosa en las hojas o unas hojas rizadas y manchadas y un crecimiento atrofiado.

Esto se debe a que los pulgones chupan los azúcares de la planta y dejan una sustancia pegajosa.

Los jabones insecticidas y el aceite de neem son excelentes opciones para deshacerse de los pulgones. Es mejor esperar al menos una semana para volver a cosechar y comer albahaca después de aplicar cualquier pulverización, y asegúrate de lavarla bien.

También ayuda plantar tiras insectarias de alyssum blanco o eneldo en flor para atraer mariquitas y otros depredadores beneficiosos que se alimentan de pulgones.

Babosas

Las babosas son otro molesto problema de la albahaca que suele aparecer en condiciones excesivamente húmedas.

Dejan asquerosos rastros de baba y agujeros dentados de tamaño medio que pueden volverse marrones o convertirse en manchas blanquecinas en la superficie de la planta de albahaca. Los daños suelen producirse primero en las partes más bajas de las plantas.

La forma más fácil de deshacerse de las babosas es con cáscaras de huevo trituradas o tierra de diatomeas esparcida en la base de la planta.

Estos bordes microscópicamente afilados matan a las babosas deshidratando sus cuerpos viscosos. También puede utilizar trampas de cerveza (un recipiente poco profundo con cerveza colocado a ras de la superficie del suelo) o trampas de cartón (coloque cartón durante la noche y sáquelo por la mañana para matar a las babosas acumuladas). Productos como Sluggo también sirven.

Para evitar las babosas en su jardín, mejore la circulación del aire, evite regar en exceso y no ponga mantillo demasiado cerca de las plantas de albahaca. De este modo, las babosas tendrán menos lugares oscuros y húmedos donde esconderse.

Factores ambientales que provocan el oscurecimiento

Si no cree que su albahaca tenga una enfermedad y no observa ningún signo revelador de problemas de plagas, el oscurecimiento de las hojas podría deberse a un problema cultural o ambiental.

1: Daño por escarcha

Una de las causas más comunes del oscurecimiento de las hojas de la albahaca son las olas de frío tempranas o tardías.

La albahaca es un cultivo de clima cálido muy sensible a las bajas temperaturas. Las hojas jóvenes vulnerables de la parte superior de la planta suelen oscurecerse y morir si se exponen a temperaturas inferiores a 35 °F.

Se pueden eliminar las hojas marrones dañadas por las heladas y revitalizar la planta amortiguando las temperaturas extremas.

Si quieres evitar que las hojas amarilleen y se pongan marrones debido a los cambios de temperatura, puedes cubrir las plantas de albahaca con un toldo de jardín, una carpa antiheladas o una cubierta para hileras.

También es mejor cultivar la albahaca sólo durante las estaciones de primavera y verano, a menos que esté protegida por un invernadero o un túnel bajo.

2: Deficiencia de nutrientes

La carencia de nutrientes no es una causa muy común de manchas marrones en las hojas de albahaca, pero una vez descartados otros patógenos, puede merecer la pena investigarla.

El potasio y el magnesio son las carencias de nutrientes más comunes en la albahaca y provocan regiones cloróticas (zonas amarillas o marrones) en las hojas, entre las venas.

Las hojas más viejas se verán afectadas primero y, a menudo, las propias venas permanecerán verdes.

La arena verde y la harina de algas son excelentes opciones orgánicas para el potasio, y las sales de Epsom (sulfato de magnesio) o un abono orgánico rico pueden ayudar a solucionar cualquier problema de magnesio.

La albahaca prefiere un suelo rico y bien drenado que contenga abundante materia orgánica, como compost o estiércol descompuesto.

3: Quemaduras solares

Aunque le encanta el sol y el calor, la albahaca es susceptible a las quemaduras solares, cuya causa más común es el agua que se asienta sobre las hojas y atrae la luz dura como una lupa.

Ésta es otra razón por la que es tan importante regar la albahaca sólo desde la base y evitar el riego por aspersión.

Las quemaduras solares pueden aparecer como manchas muertas blanqueadas o marrones en la parte superior de las hojas. Para prevenir este problema,

riegue la albahaca sólo por la mañana o por la tarde para evitar las horas del día en las que el sol brilla intensamente.

Ver también: ¿Cuál es la diferencia entre plantas anuales, perennes y bienales?

También puedes utilizar telas de sombreo si el sol es especialmente intenso, como en las regiones meridionales.

Cómo evitar que la albahaca se dore

Como puede ver, las manchas marrones o negras de la albahaca pueden deberse a un sinfín de causas. El truco universal para evitar que las plantas de albahaca sufran daños es, para empezar, mantenerlas sanas. Para ello:

  • Plantar en un suelo bien drenado.
  • Enmendar el suelo con compost y materia orgánica.
  • Utilizando el espaciado adecuado (normalmente a una distancia de 4-8" o mayor si se encuentra en una zona húmeda).
  • Riegue sólo desde la base (evite el riego por aspersión).
  • Proporcione mucha circulación (ventiladores en un invernadero si es necesario).
  • Plante variedades resistentes a las enfermedades.
  • Garantice una nutrición adecuada con un fertilizante polivalente .
  • Pode y elimine regularmente las partes muertas de las plantas.
  • No deje nunca restos vegetales en el suelo al final de la temporada.
  • Practicar la rotación de cultivos.

Reflexiones finales

Los daños antiestéticos en sus hierbas reducen el rendimiento de su huerto y pueden afectar a la comestibilidad de la cosecha.

Aunque la prevención es fundamental, a veces uno se da cuenta de que algo va mal cuando ya es demasiado tarde.

En ese momento, lo mejor es identificar la causa y tomar medidas rápidas para eliminar o remediar el problema.

Aunque muchas enfermedades de la albahaca no tienen fungicidas superefectivos, puedes salvar algunas plantas eliminando las zonas infectadas y arreglando los problemas ambientales para que los cultivos de albahaca que queden sean más felices.

Al fin y al cabo, las manchas marrones no suelen ser un gran problema. La albahaca es resistente en las condiciones adecuadas y probablemente se recuperará con un poco de cariño y cuidados.

En el peor de los casos, siempre puedes volver a plantar esta hierba de rápido crecimiento y trasladarla al interior para seguir cosechando en los meses más fríos.

¡Feliz jardinería!

Timothy Walker

Jeremy Cruz es un ávido jardinero, horticultor y entusiasta de la naturaleza proveniente de la pintoresca campiña. Con un buen ojo para los detalles y una profunda pasión por las plantas, Jeremy se embarcó en un viaje de por vida para explorar el mundo de la jardinería y compartir sus conocimientos con otros a través de su blog, Guía de jardinería y consejos de expertos en horticultura.La fascinación de Jeremy por la jardinería comenzó durante su infancia, cuando pasaba incontables horas junto a sus padres cuidando el jardín familiar. Esta educación no solo fomentó el amor por la vida vegetal, sino que también inculcó una sólida ética de trabajo y un compromiso con las prácticas de jardinería orgánica y sostenible.Después de obtener una licenciatura en horticultura de una universidad de renombre, Jeremy perfeccionó sus habilidades trabajando en varios jardines botánicos y viveros de prestigio. Su experiencia práctica, junto con su insaciable curiosidad, le permitieron profundizar en las complejidades de las diferentes especies de plantas, el diseño de jardines y las técnicas de cultivo.Impulsado por el deseo de educar e inspirar a otros entusiastas de la jardinería, Jeremy decidió compartir su experiencia en su blog. Cubre meticulosamente una amplia gama de temas, incluida la selección de plantas, la preparación del suelo, el control de plagas y consejos de jardinería estacional. Su estilo de escritura es atractivo y accesible, lo que hace que los conceptos complejos sean fácilmente digeribles tanto para los jardineros principiantes como para los experimentados.Más allá de sublog, Jeremy participa activamente en proyectos de jardinería comunitaria y realiza talleres para capacitar a las personas con el conocimiento y las habilidades para crear sus propios jardines. Él cree firmemente que conectar con la naturaleza a través de la jardinería no solo es terapéutico sino también esencial para el bienestar de las personas y el medio ambiente.Con su contagioso entusiasmo y profunda experiencia, Jeremy Cruz se ha convertido en una autoridad de confianza en la comunidad de jardinería. Ya sea para solucionar problemas de una planta enferma u ofrecer inspiración para el diseño perfecto del jardín, el blog de Jeremy sirve como un recurso de referencia para obtener consejos sobre horticultura de un verdadero experto en jardinería.